lunes, 29 de septiembre de 2014

La Última Gota

En la serenidad del lago, justo antes del amanecer, cuando golondrinas y gaviotas saludan al alba, una gota de rocio cae sobre él.

 La onda se esparce y de forma concentrica crece agitando en todas las direcciones la inmutable esencia de la superficie.

Como un pellizco despierta al somnoliento, dia a dia, gota a gota, el practicante de zazen sacude la realidad ausente encendiendo una vela en el cuarto oscuro de la mente.


Durante años, desde un rinconcito de la costa gaditana, esa gota ha sido destilada por nuestro querido Jesús.

Sirvan estas palabras para agradecer su dedicación y homenaje humilde en vida de estos que lo queremos y que hemos encontrado gracias a él el camino que cada uno sentimos, con libertad y amor.

Gracias a él esa gota seguirá cayendo cada dia sobre el lago, generando la inquietud necesaria para despertar y ver de forma clara las luces del amanecer.